Los ovnis de procedencia Alemana

La Antártida ha provocado la imaginación de muchos, y creado muchos mitos entre ellos la posible existencia de bases nazis en una zona recóndita del Polo Sur, donde existirían unas condiciones meteorológicas más benignas.
Misterios MMYC ofrece, creo que por primera vez, una investigación llevada a cabo por tres belgas llamados Edgar Simons, Ben van Pret y Henk Elshout. Estas tres personas pertenecen a un centro belga de estudios Ovni ( EUFOC ).

Es un hecho cierto que los alemanes llevaban la delantera del progreso científico y tecnológico durante la Segunda Guerra Mundial. Sólo con un poco más de tiempo, Hitler hubiera conseguido la bomba atómica, pero las bombas aliadas destruyeron los depósitos de agua pesada que tenían los alemanes en Rjukan, en la región de Telemark en Noruega, próximo al lago Tinnsjo.

El aniquilamiento de estas instalaciones la llevó a cabo un comando noruego, especialmente adiestrado en Gran Bretaña: la compañía Linge.
Los nazis fueron los primeros en construir misiles y cohetes y también los reactores experimentales de aviones-cohetes (las famosas V-1 y V-2), un avión movido por un pulso reactor, sin piloto, un misil balístico movido por un motor cohete y llegaron a emplear el rayo láser contra los rusos, en el frente de batalla del Este.

Luego, los soviéticos capturaron a los científicos que trabajaban en el proyecto y se llevaron los planos del Proyecto Láser. Por su parte, Werner Von Braun creador del proyecto Apolo a la Luna, se pasó a los norteamericanos con la plana mayor de los científicos de Peenemunde.

Objetos voladores no identificados Nazis

Pasada la guerra, dio la sensación de que la supremacía tecnológica era dominio delos rusos y norteamericanos. Pero recordemos que los alemanes se habían adelantado en el proyecto de la bomba atómica, la exploración de la Antártida y la construcción de un vehículo volador de forma discoidal, es decir OVNIS Nazis.

Existe la posibilidad no sólo de bases secretas en la Antartida, sino en el Brasil y en la Patagonia argentina. Muchos dirigentes nazis se ocultan en esta parte del mundo bajo nombres supuestos.
Seguramente, submarinos alemanes transportaron a científicos y técnicos, materiales y diversos equipos a Sud América y al Polo Sur.

Platillos voladores alemanes

Durante la guerra, en los laboratorios de investigación científica de los Servicios de Información que pertenecían al 10º Cuerpo de la Wehrmacht, se experimentaba con una máquina voladora en forma de plato. Este proyecto estaba dirigido, entre otros, por Niels Christiansen, Hans Kosinko, capitán de aviación, y el coronel Richard Miethe.

El equipo estaba en contacto con Giuseppe Belluzzo que fue quien inventó el primer turborreactor italiano. Belluzzo declaró que ya en 1942 los alemanes estaban trabajando en una aeronave en forma de platillo volador.
Niels Christiansen, tras ser detenido en Brasil, declaró que en ese año el «plato volador» alemán ya había realizado vuelos experimentales.

Existían cinco prototipos que volaban a una velocidad media de 1700 kilómetros por hora y podían alcanzar una altitud de 20.000 metros. El propio Dr. Miethe ratificó esta información, agregando que se trataba de un aparato supersónico.

El libro de Renato Vesco (Interceptados sin disparar), da cuenta de un incidente cuando estos platillos alemanes entraron en acción: “El caza alemán, redondo carente de alas y timones, alcanzó imprevistamente a los cuatrimotores “Liberator“ cruzándose con ellos por la parte de proa a una velocidad enorme y durante su paso ante la formación emitió ciertas nubecillas de humo a su lado. Poco después, los bombarderos norteamericanos se incendiaron misteriosamente estallando en vuelo, mientras que el reactor alemán ya había desaparecido en el horizonte“.

Una versión breve de este informe secreto (de acuerdo a la versión de Vesco), fue incluida en un reportaje sobre los últimos adelantos de la industria aeronáutica alemana, que redactó un diplomático francés pro – gaullista, que vivía en Suiza.
Este documento fue interceptado por agentes de la República Social Italiana, de Mussolini y culminó en manos de los Servicios de Información aliados que seguían al VIII Ejército.

Los aliados jamás pudieron dar con los cinco prototipos señalados. Además la historia daría para un voluminoso libro.
Aún así, ciertos artefactos bélicos alemanes tenían una curiosa forma lenticular y eso no es ningún secreto. Bajo la denominación de V-4 (la mayor parte del público solo conoce la V-1 y V-2) – se diseñaron y construyeron numerosos discos voladores a los efectos de ser utilizados como “bombas volantes“.

Investigaciones del fenómeno OVNI

Las informaciones llegadas a algunos investigadores del fenómeno ovni afirman que en 1942 se trabajaba intensamente en la “ Peonza Volante “ de Schriever –Habermohl, un aparato volador de forma circular, con despegue vertical, con motores de “reacción convencional“ en cuyas primeras pruebas de vuelo se constataron inexplicables defectos de construcción.
Al trabajar unidos los ingenieros Richard Miethe y Giuseppe Bellonzo aparecería una nueva versión de la V-7.
Este esfuerzo mancomunado de los equipos “ Miethe –Bellonzo” y “Schrieber – Habermohl “, forjaron la increíble V-7, un aparato volador similar a un helicóptero ultrasónico que presentaba doce turbo BMW –028.

Algunos datos afirman que en la primera prueba se elevó a una altura de 20.813 metros y en la segunda 24.200 utilizando helio como ”combustible base”.
También se desarrolló y probó una serie de “platos voladores“ conocidos como la serie Vril. En ella trabajó el “grupo Schumann“ en íntima relación con el departamento E-4, de las SS, especializado en “armas milagrosas“.

De la serie Vril se construyeron 17 aparatos con un diámetro de 11,56 metros que podían volar a una velocidad de 2.900 kilómetros por hora, que portaban un cañón teledirigido para ser utilizado en combate.
(Este curioso diseño parece coincidir con el misterioso aparato que fue visto en la Luna por el astronauta estadounidense Edwin Aldrige.

Nada nos impide pensar que junto a los Ovni extraterrestres puede haber ovnis fabricados aquí en la Tierra.
Considero oportuno responsabilizar plenamente de esta información a los tres investigadores belgas mencionados.
Todas aquellas personas que deseen más información pueden escribirles a:
BELGIAN INTERPLANETARY
STUDY CIRCLE ,MAASFORTBAAN
187 LIER ,BÉLGICA